Tocamos fondo

Ahora sí es cuando decimos que definitivamente hemos tocado fondo. Nuevamente no hay excusas. La mañana había empezado con una buena noticia: por mala inclusión de un jugador rival, se le dio por ganado a La Gata Gallarda el partido jugado el sábado ante Real Potosí, por 2-0. De esta manera, el 1-3 y el gol en contra de Chaine quedaron borrados de los anales de la historia: nada ocurrió. Por lo tanto, La Gata permanecía con chances matemáticas intactas en el Hexagonal, pero sin posibilidades futbolísticas, anímicas ni físicas. Sumó lo que fue la cuarta derrota consecutiva en cancha (sin contar el reciente triunfo en el escritorio) y el panorama es preocupante de cara a la Promoción que ofrece una oportunidad de ascenso a la B.

La Gata pudo reunir los nueve jugadores del equipo pero salió con un esquema diferente: Chala salió del arco para ser wing izquierdo y Poool ocupó su lugar en la valla. El resultado fue negativo: el pobre Poool se comió cuatro y el conjunto verdirrojo perdió 4-0 ante Gatoreid Srta, que posiblemente sea el mejor equipo de la categoría. La capacidad de juego, la fortaleza física y la solidez de Gatoreid fueron argumentos más que suficientes frente a un equipo desorientado, deshilachado, vulnerable en defensa, sin presencia en el medio y sin peso ofensivo. La Gata hizo todo mal: fue superado ampliamente en todo momento del partido y la diferencia en el marcador reflejó lo ocurrido en el juego. Mientras que Gatoreid tiene en claro lo que hacer en la cancha y por eso tiene grandes chances de ascender, La Gata Gallarda se presenta como un equipo quebrado, sin respuestas.

Se ha tocado fondo, y ahora sólo resta mejorar. Hay que salir de esta situación. Todavía queda un partido sin importancia ante La Solidaria, y luego sí viene la Promoción, en donde debe reaparecer el fuego sagrado de la Quinta.